Hola a todos. Cómo pasan los días. Siempre pienso "de hoy no pasa sin escribiros" pero después el tiempo se nos echa encima con todas las cosas que hay que hacer cada día a la vuelta del trabajo.
El fin de semana pasado estuvimos en el Montseny, en una masía muy chula que también es un restaurante muy conocido y tiene unos jardines espectaculares, con piscina y todo.
Y el tiempo también acompañó, con solete y temperaturas ya veraniegas, así que Nicolás le sacó partido a la piscina y al cesped, y a la plaza del pueblo del Montseny, y al parque de Sant Esteve.
Papá pudo salir a correr el domingo por la montaña y disfrutar de su primer trail con sus Trabuco nuevas, ahora que tenía mejor los dedos del pie.
Y nosotros pues nos quedamos en el hotel, jugando al fútbol con los niños de las otras familias que estaban de fin de semana, con Richard, con Lucía y Núria, y sobre todo con Pol, que aunque ya es un niño mayor estuvo todo el tiempo con Nicolás, enseñándole su álbum de cromos de fútbol, y quiénes eran los jugadores del Barça y los del Espanyol, y le enseñó a chutar fuerte y a tirar la pelota afuera, a la montaña, y a columpiarse, y a recoger las hojas y los bichos que caían a la piscina con la redecilla, y le enseñó también a jugar con su Nintendo.
Y el día que se despidieron se dieron un abrazo fuerte fuerte.
Hasta otro día "Pau-Pol" (que así le dio por llamarle a Nicolás) y familia!
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